La UCO descarta la imputación del fiscal general tras dos meses de juicio mediático

Es importante destacar que el juez Ángel Hurtado estuvo presente en el tribunal del primer juicio de Gürtel, donde el PP fue sentenciado a título lucrativo

Los dos meses más críticos de la gestión de Álvaro García Ortiz como fiscal general del Estado están casi concluyendo después del informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, que este jueves debatía en dos folios los descubrimientos hechos en el móvil de García Ortiz relacionados con la filtración del correo relacionado con la confesión del novio de Isabel Díaz Ayuso. Así lo ha informado Público.

El 16 de octubre, el Tribunal Supremo iniciaría un proceso legal contra el fiscal general del Estado, en una resolución nunca antes vista en la democracia de España. Desde aquel instante, la ofensiva de la derecha se volvió incesante solicitando la renuncia de Álvaro García Ortiz. En los últimos dos meses, la lucha mediática contra la máxima autoridad de la Fiscalía ha sido intensa y persistente, con las críticas de las asociaciones fiscales más conservadoras. 

«Cero mensajes»

Dos semanas tras el inicio de la investigación contra el fiscal general por un supuesto crimen de divulgación de secretos, el magistrado instruía la inscripción de su oficina. La Fiscalía General del Estado recibió a la Guardia Civil, la cual confiscó el móvil, ordenador y otros equipos de García Ortiz. Una resolución tildada de «injustificada» y «desproporcionada» por fuentes legales altamente competentes.

Sin embargo, la UCO ha descubierto «cero mensajes» en el móvil del fiscal general entre el 14 y el 18 de marzo de 2024, periodo en el que se filtró y se difundió un email del letrado del empresario Alberto González Amador, pareja de la presidenta Ayuso, a la Fiscalía de Delitos Económicos, acusándolo de dos delitos fiscales por un montante de 350.000 euros. 

La Fiscalía General del Estado ha confirmado que lleva a cabo un «borrado cíclico» del contenido de los dispositivos móviles de los altos puestos del Ministerio Fiscal por razones de protección. Así, se justifica la ausencia de mensajes en el móvil del fiscal general durante los agitados días de marzo, cuando se revelaron los dos correos más relevantes, entre los que se toparon el letrado de González Amador y la Fiscalía respecto a la defraudación a Hacienda de la pareja de Ayuso.

MAR y sus bulos

El primer mensaje de correo electrónico se publicó en El Mundo el 13 de marzo a las nueve y media del día, según indica Público. Se trataba de un rumor acerca de la propuesta de la Fiscalía al novio de Ayuso de un acuerdo para que aceptara dos crímenes fiscales mientras se tramitaba el caso judicialmente. Era una falsedad fundamentada en un correo electrónico que en realidad Julián Salto, el fiscal de delitos económicos de Madrid, envió al letrado de la pareja de la presidenta madrileña.

En ese correo, Salto comunicaba al letrado que el 5 de marzo, la Fiscalía había interpuesto una denuncia contra la pareja de Ayuso. «Aunque se ha denunciado también a otras personas, no será obstáculo para poder llegar a un acuerdo si usted y su cliente lo estiman posible», afirmaba el fiscal.

Con esta expresión descontextualizada, el equipo de la presidenta Ayuso, especialmente su jefe de gabinete, Miguel Ángel Rodríguez (MAR), implementó un plan para desviar la atención de los delitos fiscales de González Amador, quien defraudó 350.000 euros a empresas de venta de mascarillas durante la pandemia mediante facturas falsas; y centrar la atención en la labor de la Fiscalía.

¿Quién está detrás de la acusación?

Es importante tener en cuenta que son cuatro las entidades que se han constituido como acusación popular en el caso contra el fiscal general y la fiscal superior de Madrid debido a la divulgación de la confesión del novio de Ayuso: el Colegio de Abogados de Madrid; la Asociación Profesional e Independiente de Fiscales (APIF), que tiene un representante en el Consejo Fiscal; la organización radical Manos Limpias y la Fundación Foro Libertad y Alternativa, creada por Alejo Vidal-Quadras, cofundador de Vox.

Además, es importante destacar que el juez Ángel Hurtado estuvo presente en el tribunal del primer juicio de Gürtel, donde el PP fue sentenciado a título lucrativo. Hurtado dio un veredicto específico en contra de ese fallo. Además, durante el proceso judicial intentó de todos los modos impedir que Mariano Rajoy y los exministros más destacados del PP sean presentados ante el tribunal en calidad de testigos.

El juez Hurtado fue enérgico al ordenar que Rajoy se ubicara en la Sala a la misma altura que el tribunal, en lugar de ocupar el lugar reservado para los testigos, que es más bajo.